Ya afirmaba Baltasar Gracián en su Oráculo Manual que "son tontos todos los que lo parecen, y la mitad de los que no lo parecen". En cierta ocasión me tocó defender a un tipo que había asaltado una farmacia con una palanqueta, se había introducido en su interior, y tras hacerse con la caja, se marchó tan pancho dejándose tras sí... la cartera con toda su documentación. Los policías que le detuvieron se partían de la risa en el juicio.
Esto viene a cuento de la historia que leemos en Neatorama. El angelito de la foto se coló en una vivienda habitada, levantó unas cuantas joyas, y ya de paso, se pimpló media botellita de vodka que había en la cocina. Cuando la dueña de la casa subió a su dormitorio, se encontró con Mark Smith, que así se llama el pájaro, disfrutando de un plácido y reparador sueño debajo de la cama.
La imagen de los pies asomando por debajo del somier tuvo que dejar turulata a la denunciante. No cuesta imaginar la pregunta que se haría la pobre mujer: ¿Qué hago? ¿Le despierto?
Comentarios | Enlace permanente | Recomendar: